Las galaxias espirales NGC 5426 y NGC 5427 están pasando peligrosamente muy cerca la una de la otra, pero ambas sobrevivirán a esta colisión.
Lo más frecuente cuando las galaxias colisionan es que la grande se come a la pequeña.
En este caso, sin embargo, las dos galaxias son bastante similares, ambas con una extendida espiral con grandes brazos y un núcleo compacto.
Como las galaxias avanzarán en las próximas decenas de millones de años, las estrellas que las componen raramente colisionarán, aunque se formarán nuevas estrellas en el cúmulo de gases causados por mareas gravitacionales.
Una inspección en detalle de la imagen superior realizada por el Telescopio de 8 metros Gemini-South en Chile muestra un puente de material momentaniamente conectando las dos gigantes.
Conocido colectivamente como Arp 271 , el par interactivo ocupa unos 130.000 años luz y yace a unos 90 millones de años luz en la constelación de Virgo.
Bastante posible, nuestra Vía Láctea se someterá a una colisión similar con la vecina Galaxia de Andrómeda en unos cinco mil millones de años.
Créditos & Copyright: Gemini Observatory, GMOS-South, NSF
Tomado de www.elobservatorio.info
lunes, 21 de julio de 2008
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