La enorme cuenca Caloris en Mercurio es una de las cuencas de impacto más grandes del Sistema Solar. Creada en las primeras épocas del Sistema Solar por el impacto de un cuerpo del tamaño de un asteroide, la cuenca se expande unos 1.500 kilómetros y se puede ver en tonos amarillentos en este mosaico de color realzado.
La imagen es del 14 de enero cuando la sonda MESSENGER sobrevoló Mercurio capturándola con el instrumento MDIS. Las manchas anaranjadas alrededor del perímetro de la cuenca se sabe ahora que son respiraderos volcánicos, nuevas evidencias de que las llanuras de Mercurio son de hecho flujos de lava.
Otros descubrimientos en Mercurio realizados por la misión MESSENGER de la NASA incluyen evidencias de que ese planeta, como la Tierra, tiene un campo magnético global generado por un proceso de dinamo en su gran núcleo, y que la superficie de Mercurio se ha contraído significativamente por el enfriamiento de dicho núcleo.
Image Créditos: Courtesy of Science/AAAS
Tomado de www.elobservatorio.info
jueves, 10 de julio de 2008
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